La UNQ es una de las universidades más importantes del país y cedió sus aulas para convertirlas en un espacio sanitario
La Universidad Nacional de Quilmes (UNQ), institución consolidada en el ámbito de la investigación, alcanzando el quinto lugar del ranking de instituciones de Educación Superior del país, entre 55 universidades, ha cedido sus aulas para transformarse en un centro de aislamiento sanitario, que permita colaborar con la emergencia sanitaria de Quilmes. Además, allí trabajan 20 docentes investigadores, en su mayoría científicos del Conicet, en el área de laboratorio realizando las pruebas de Covid-19, y se forma a 26 mil estudiantes al año.
“Hoy estamos funcionando como centro de aislamiento porque somos una institución incorporada al contexto social, con un altísimo porcentaje de comunidad universitaria que vive en Quilmes, y proponerle al Municipio usar nuestras instalaciones es también cuidar a la comunidad. Nos pareció adecuado en una emergencia de este calibre”, explicó el vicerrector de la UNQ, Alfredo Alfonso.
La Universidad de Quilmes le brindó al Municipio reconvertir un espacio para albergar a las personas que puedan ser casos sospechosos o confirmados de coronavirus y que no puedan hacer la cuarentena domiciliaria. Esas personas son aisladas y se les brinda una cama y atención adecuada, dentro de las aulas que se han transformado hoy en pasillos de hospital. La universidad cedió el pabellón de planta baja y el comedor de las instalaciones.
En el ámbito del laboratorio, trabajan 20 profesionales en grupos de a diez, se trabaja 14 horas por día, teniendo dos equipos preparados ante la necesidad.
Este centro de aislamiento tiene el objetivo de tener aislados a los cuadros leves del coronavirus, tanto sospechosos como confirmados, que no puedan cumplir el aislamiento en sus domicilios, ya sea por las condiciones de la vivienda o por convivir con personas consideradas dentro del grupo de riesgo. Hay un total de 133 camas divididas en dos pabellones, uno de varones y uno de mujeres.