La Intendenta trató de estafadores a los concejales de la oposición tras un comunicado de la ONG Caballos de Quilmes
La intendenta Mayra Mendoza emitió un descargo furioso en sus redes tras un comunicado que emitió la ONG Caballos de Quilmes, donde las proteccionistas aseguraban que en Quilmes los trabajadores informales que utilizan la tracción a sangre iban a ser autorizados por el Concejo Deliberante para juntar la basura del distrito.
“Esta mentira está generada por concejales del bloque
Juntos por el Cambio y es lógico. Se acostumbraron a mentir, a estafar a la
gente. A engañar y así gobernaron. Hicieron de la mentira una práctica política
y así gobernaron”, expresó Mayra Mendoza.
“Las mentiras de destruyen con la realidad y la realidad en Quilmes es que
estamos comprando camiones nuevos para poder mejorar la recolección de residuos
que encontramos destruido”.
“Respecto a la tracción a sangre, Molina no hizo nada, salvo que el
último día de su mandato reglamentó a las apuradas una ordenanza del gobierno
de Gutiérrez. Esta es la verdad”, sostuvo la Intendenta.
Los ediles de Juntos por el Cambio respondieron con un comunicado:
“La intendente de Quilmes Mayra Mendoza, trató de “irresponsables” a concejales de Juntos por el cambio. Según la titular del ejecutivo municipal, la oposición hizo circular la información que la recolección de basura en el distrito se comenzaría a realizar mediante carros tirados por caballos: “Se acostumbraron a mentir, a estafar a la gente, a engañar y de esa manera siguen actuando como oposición, hicieron de la mentira su práctica política”, afirmó. El presidente del bloque de concejales de Juntos por el Cambio Quilmes Juan Bernasconi, salió a cruzar los dichos de Mendoza diciendo que “espera que tenga pruebas para confirmar las acusaciones, advirtiendo que la agresión y la descalificación no hacen más que dañar la representatividad democrática”.
Las acusaciones de Mendoza, vienen de la mano de versiones que afirman que en el distrito no se cumple con la prohibición de la tracción a sangre dispuesta en la ordenanza 11840/12 que fuera reglamentada durante la gestión de Martiniano Molina cumpliendo con una orden judicial que dió lugar a un recurso de amparo presentado por organizaciones no gubernamentales. Según Bernasconi, en las reuniones de labor legislativa se les suministró información sobre los proyectos enviados por el Ejecutivo dentro de los que se encuentra la modificación del Artículo 1° de la ordenanza que, de realizarse, seguiría prohibiendo la tracción a sangre mediante uso de animales, pero dejaría habilitado el de “tiro humano”, ya que el oficialismo considera que la demora en el reemplazo de los medios de transporte de tracción a sangre por los medios mecánicos, genera inconvenientes para los trabajadores de la economía informal, facultando al Ejecutivo a reglamentar la ordenanza y adecuarla a la reglamentación vigente. El bloque de Juntos por el Cambio Quilmes, considera que ésta y otras ordenanzas tienen como objetivo “limitar” la participación parlamentaria, delegando funciones sólo en el Ejecutivo: “No somos un eslabón administrativo, formamos parte del Honorable Concejo Deliberante de Quilmes y representamos a miles de vecinos que depositaron en nosotros su representatividad”, concluyeron”.